Hoy vamos a seguir con unos consejos para poder ahorrar en nuestra factura de la luz y así poder conseguir tener algo más de dinero al finalizar el mes. Se trata de unos pequeños hábitos cotidianos que pueden hacernos ahorrar hasta un 10% en nuestra próxima factura.
1- El más sencillo de los consejos y más elemental es adecuar la ropa a la época del año en la que estamos. Por ejemplo, en el invierno no debemos pretender ir en camiseta de manga corta por la casa, eso supondría un despilfarro energético y de dinero.
2- El primer consejo es apagar las luces de las habitaciones que no estemos utilizando, porque aunque parece obvio muchas veces dejamos encendidas las luces sin darnos cuenta durante largos períodos. Es aconsejable apagar la luz de una habitación si vamos a estar fuera durante más de 15 minutos.
3- Apagar completamente los electrodomésticos e intentar mantener el menor número de ellos en “Stand by”. Este simple gesto puede ayudarnos a ahorrar bastante. Para ello es aconsejable enchufar todos los aparatos que podamos y que no vayamos a utilizar por ejemplo mientras dormimos o cuando estamos fuera de casa a una base de enchufes con corte de corriente.
4- Desenchufar los cargadores de la red una vez que terminemos de cargar los aparatos. Aunque ya no se esté usando sigue consumiendo energía.
5- En la cocina, donde las luces pasan muchas horas encendida es conveniente utilizar tubos fluorescentes, que pueden llegar a durar unas 8 veces más que los convencionales y su consumo 6 veces menor.
6- Siempre que podamos utilizar el microondas en lugar del horno, su consumo es un 65% menos. Ahora bien, si finalmente necesitamos utilizar el horno, aquí tenéis unos consejos para seguir ahorrando: evitar abrir innecesariamente la puerta del horno, al hacerlo se pierde un 20% de la energía alcanzada en el interior. Cuando vamos a cocinar algo que tarde más de 1 hora, no es necesario precalentar el horno, encenderlo con la comida ya dentro. Apagar el horno 5 minutos antes, para aprovechar el calor residual aun estando apagado (este consejo también aplicable para las vitrocerámicas). El uso de moldes de color negro o de vidrio absorben mejor el calor y con ello disminuye el consumo. Utilizad la olla a presión cuando sea posible.
7- Sobre el frigorífico: la temperatura que debe tener es de 5ºC y el congelador -18ºC. Debemos intentar no introducir en el frigorífico cosas muy calientes, pues necesitará trabajar a máxima potencia para poder alcanzar la temperatura deseada. De forma periódica debemos quitar la capa de hielo que muchas veces se forma en el interior, este simple gesto puede ayudarnos a ahorrar un 30%.
8- En la lavadora intentar llenarla de ropa pero sin sobrecargarla. Cuando sea posible lavar con agua fría.
9- Uno de los grandes consumos que tenemos en los hogares es el de la plancha. Debemos empezar planchando las prendas que necesitan menos calor para aprovechar el tiempo que tarda nuestra plancha en alcanzar la temperatura deseada. Lo mejor sería planchar cuando ya tenemos una gran cantidad de prendas.
10- En verano debemos cerrar ventanas, cortinas y persianas para evitar la entrada de calor en casa durante el día. Ventilar la casa a primera hora aprovechando el frescor de la mañana e intentar refrescar de forma natural las habitaciones de la casa. Si disponemos de aire acondicionado la temperatura recomendable es de 24ºC.
11- En invierno debemos abrir todas las cortinas y persianas para permitir la mayor entrada de luz posible ayudando a calentar un poco nuestra casa de manera natural y cerrarlas durante la noche para evitar el escape de calor que se produce por estos elementos.
12- Cambiar las bombillas convencionales (que como ya sabréis se ha prohibido su venta) por bombillas de bajo consumo o led, su consumo es menor, aportan más luminosidad y su vida útil es mayor que las convencionales. Es recomendable ir cambiándolas según se vayan fundiendo, no de hacer un gasto excesivo cambiando todas las bombillas de la casa a la vez (os recordamos que estamos intentando ahorrar).
13- Hacer un buen cálculo de la potencia necesaria para nuestra vivienda, de forma que no paguemos en exceso por una cantidad innecesaria de potencia. Es decir, contratar la potencia que realmente necesitamos según nuestras necesidades. Existen calculadoras en internet que nos pueden ayudar a conocer cuál es la potencia que debemos contratar:
http://comparador.elmundo.es/electricidad/
14- Comparar entre las distintas compañías existentes en nuestro país. Existen páginas webs que nos ayudan a comparar entre las distintas tarifas y compañías. Algunos de los comparadores que podemos utilizar son:
http://www.comparador.cne.es/comparador/index.cfm?js=1&e=N
http://www.comparatarifasenergia.es/
http://www.tarifasdeluz.com/
15- Utilizar un termostato inteligente con el que podamos controlar: temperatura, hora de inicio y apagado de caldera… Esto nos ayudará a ahorrar energía y por supuesto gas.
16- Si tenemos que renovar electrodomésticos pues se nos han estropeado, intentar adquirir uno de alta calificación energética cuyo consumo sea menor. Las escalas del nuevo etiquetado energético van desde la escala de letras desde la A+++ hasta la D (de mayor a menor eficiencia).
17- Es muy difícil controlar el gasto energético, ya que realmente no somos consciente de cuanto consumimos, una gran solución para ayudarnos a disminuirlo es instalar un monitor de energía que nos permita controlar y visualizar nuestro consumo al instante.
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