lunes, 15 de abril de 2013

Cuidado con las "dietas milagro"

Con la llegada del llamado " buen tiempo" y con el verano ya a la vuelta de la esquina, se incrementa el número de personas que deciden iniciar una dieta con el objetivo de bajar peso y "lucir" mejor la próxima temporada. Ya os explicamos en un artículo anterior cómo podíamos comprobar si realmente necesitamos perder kilos o no en base al cálculo de nuestro IMC ¿recordáis?. Hoy queremos detenernos en el desván de la salud sobre algunas consideraciones importantes a tener en cuenta antes de iniciar una dieta y explicaros porqué hay que huir de las llamadas "dietas milagro".
Continuamente aparecen en televisión, en las revistas de moda, etc... nuevas dietas de adelgazamiento, a veces "apadrinadas" por algún famosillo de turno que asegura una rápida pérdida de peso sin ningún esfuerzo, son las llamadas "dietas milagro". La mayoría de estas dietas no tienen ningún rigor científico y están prescritas por personas que no pueden acreditar los conocimientos en medicina o, al menos, en nutrición necesarios para llevar a cabo esta labor y muchas de ellas responden únicamente a fines económicos. 

¿Cómo podemos reconocer una dieta milagro?

- Nos prometen una pérdida de peso rápida, generalmente más de 5 kilos al mes.
- Nos aseguran que no requiere ningún esfuerzo ni "sacrificio alimentario".
- Nunca falta la coletilla de que son seguras, es decir, no suponen ningún riesgo para la salud.


¿Qué problemas conllevan este tipo de dietas?

1 - Pueden provocar deficiencias de proteínas, vitaminas y minerales por la falta de consumo de ciertos alimentos... Generalmente inducen una restricción severa de la energía ingerida, aportan muy pocas calorías y esto nos lleva a una destrucción de las proteínas y a una pérdida de masa muscular, así como a la formación de sustancias que a largo plazo pueden ser peligrosas para el organismo. La pérdida de masa muscular y por tanto la pérdida de peso hace que  erróneamente lo interpretemos como  un éxito, espectacular sobre todo en las primeras semanas.

2 - Muchas de estas dietas se asocian al consumo de diuréticos, que son fármacos que promueven la excreción de orina; esto hace que la pérdida de peso sea aún más llamativa, pero a costa de perder líquidos que puede llevarnos a una alteración en el balance de los electrolitos (sodio, potasio ...)

3 - Favorecen el efecto rebote o efecto "yo - yo". Como ya demostró en sus experimentos el gran científico español de nutrición Profesor Grande Covián. La misma dieta desencadena mecanismos que conducen a una rápida recuperación del peso cuando volvemos a comer de forma habitual.

4 - Pueden desencadenarse trastornos del comportamiento alimentario (anorexia o bulimia), más peligrosos que el exceso de peso que queríamos combatir.

5 - Al dejar la dieta, las personas siguen sin aprender a comer saludablemente, vuelven a las mismas costumbres y hábitos de alimentación que tenían previamente y, por tanto, retornan a su exceso de peso.

Los tres grandes grupos de "dietas milagro":

- Las dietas hipocalóricas desequilibradas: son las que más efecto rebote provocan y las que conllevan mayor deficiencias de nutrientes. Son de este tipo : dieta cero, dieta "toma la mitad", dieta de la clínica Mayo y dieta Gourmet, entre otras.

- Las dietas disociativas: son las que recomiendan no combinar determinados alimentos; no consideran que los alimentos contribuyan al aumento de peso por sí mismos sino al consumirlos combinados con otros. Esta teoría no tiene fundamento científico y los resultados se deben a una importante restricción calórica. Son de este tipo: dieta de Hay, régimen de Shelton, dieta de Hollywood (sin comentarios) o la dieta de Montignac.

- Las dietas excluyentes: consisten en eliminar de la dieta un determinado nutriente: hidratos de carbono, lípidos o proteínas. Estas dietas pueden, a largo plazo, aumentar los cuerpos cetónicos y ser peligrosas para la salud por las alteraciones del metabolismo que pueden producir. Se incluyen en éstas: dieta de Atkins, dieta de Lutz o la dieta del Dr. Haas. En este grupo se incluye la famosa hoy dieta Dukan.

¿Qué hay de la dieta Dukan?

Nos detenemos en esta dieta por ser una de las más populares en la actualidad. Defendida y  promocionada por el dietista francés Pierre Dukan, quien ha logrado una inmensa fortuna con la venta de los libros y guías explicativas de esta dieta, publicadas en al menos 32 países.
Se desarrolla en cuatro fases en las que se puede comer tanto como se quiera pero restringiendo por etapas determinados grupos de alimentos que pasarán a ser alimentos "permitidos" y "no permitidos". 
Se trata de una dieta muy restrictiva en cuanto a calorías y aunque es cierto que la pérdida de peso puede ser espectacular a corto plazo, también es cierto que constituye un importante riesgo potencial para nuestro organismo por la pérdida de masa muscular y la formación de cetónicos que además de ser perjudiciales para nuestro metabolismo, pueden afectar entre otras cosas al rendimiento intelectual y al humor. Es completamente inútil en casos de obesidad porque no elimina la grasa del cuerpo sino los líquidos, en especial, el agua.
El Ministerio de Sanidad no recomienda este tipo de dieta por los datos obtenidos a largo plazo.

Recomendación final:

Si realmente te preocupa tu peso y deseas perder algunos kilos, ponte en manos de expertos acreditados en dietética y nutrición, que de una forma saludable te llevarán a tu objetivo. Habla con tu médico o enfermera o bien acude a un especialista en endocrinología y metabolismo. Te enseñarán hábitos de alimentación saludables; en muchas ocasiones con un incremento del ejercicio físico, evitando el consumo de determinados productos hipercalóricos (embutidos, grasas animales, bollería industrial, precocinados, bebidas carbonatadas, etc...)   y reduciendo la cantidad de comida que ponemos en el plato, pero sin restricciones peligrosas, puede ser suficiente. No te juegues nunca tu salud. ¿Qué opinas? 




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