Comenzaremos definiendo qué es un banco malo: podríamos decir que se trata de una "entidad" a la cual el estado ha transferido todos los “activos tóxicos” del resto de entidades bancarias.
Y ahora os preguntaréis qué es un activo tóxico. Se trata de todos los activos que forman parte del balance de las entidades bancarias: activos inmobiliarios sobrevalorados, créditos, hipotecas, con posibilidades reales o futuras de impagos.