viernes, 12 de julio de 2013

Alimentos de temporada: "El Verano"

Cuando hace calor, nuestro organismo agradece las comidas ligeras. Una de las grandezas de la naturaleza es poder disfrutar de las frutas y verduras de temporada, que por su contenido en agua, contribuyen a que nuestro cuerpo esté bien nutrido e hidratado de una forma muy apetitosa. Os traemos hoy al rincón del hogar los productos más recomendables de esta estación del año, aquellos que llegan al verano en las mejores condiciones de calidad.
La cesta de verano está llena de sabor y aromas. Es el momento de disfrutar de productos frescos que se encuentran en su mejor momento.

Frutas:

Melocotón, higos, nectarinas, paraguayas, albaricoques, frambuesas, cerezas, peras, arándanos, mango, sandía y melón.


Aprovecha este tiempo para el consumo de frutas. Además de ser un refrescante natural, son una importante fuente vitamínica. Desde la OMS (Organización Mundial de la Salud), se recomienda el consumo de 5 piezas de fruta al día. Acostúmbrate, eso sí, a adquirir sólo la cantidad justa para el consumo de los 2-3 días siguientes ya que en esta estación, por las altas temperaturas, se deterioran con facilidad. 

No hemos encontrado datos concluyentes que indiquen si es mejor su conservación en el frigorífico. Nosotros apostamos por tenerlas en un lugar fresco de la casa y si te gusta consumirla más fría, puedes meterla en el frigorífico un rato antes de consumirla.

 Verduras:

Tomate, pimiento verde, pepino, calabacín, cebolletas, berenjena, judías verdes, zanahorias, lechugas y también hierbas aromáticas ( eneldo, albahaca, menta y estragón).


Las verduras son ricas en clorofila, conocida por sus propiedades antioxidantes. Las verduras se incluyen siempre en programas nutricionales de desintoxicación. El calabacín, por ejemplo, es un buen diurético y laxante y las cebolletas pueden ser estimulantes del sistema nervioso.

Un buen consejo sería preparar cada día una ensalada variada aprovechando estos productos pues su consumo en crudo favorece el aprovechamiento de sus nutrientes. Si te gustan más cocinadas, opta por consumirlas hervidas o al vapor (o bien en olla a presión si quieres ganar tiempo) para que conserven mejor sus vitaminas. 

¿Queréis saber una curiosidad? En algunos puntos de España, cuenta la tradición que las verduras recogidas en la noche del 23 de junio tienen propiedades especiales; curioso, ¿verdad?

Carnes:

Pollo, pichón de granja (en junio), carnes rojas y cerdo. 


La carne es un alimento rico en proteínas y una inmejorable fuente de aminoácidos. También pueden aportarnos, aunque en menor medida, vitaminas del grupo B y minerales. Entre éstos últimos cabe destacar el hierro, no tanto por su concentración como por su disponibilidad.

Pescados:

Atún y bonito, sardinas, boquerones, trucha (finales de agosto), bacalao, caballa, lubina, dorada, salmonete, mejillón, calamar, chipirón, gallos, pescadilla y merluza.


Los pescados poseen propiedades nutricionales que los convierten en alimentos fundamentales dentro de una alimentación sana y cardiosaludable. Poseen proteínas de excelente calidad y su perfil lipídico, es decir, de grasas, es más saludable que el de otros alimentos como las carnes. Además aportan pocas calorías y son fuente de calcio.

Hasta hace poco, su contenido en ácidos grasos omega 3, ha sido protagonista en tratamientos contra el colesterol aunque actualmente ésto parece controvertido y se están realizando más estudios que arrojen luz sobre este tema.

Con toda esta variedad de productos, ¿no te apetece prepararte un menú veraniego sano y lleno de aroma y sabor?

 




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