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domingo, 7 de abril de 2013

El Ático (Parte 5)


Sábado 8 de septiembre de 2012

   He vuelto a la casa hoy temprano por la mañana pero apenas he podido hacer nada útil. Escribo en el antiguo escritorio del salón un momento antes del mediodía. Necesito dejar constancia de lo que ha ocurrido antes de que la memoria me gaste malas pasadas.

domingo, 24 de marzo de 2013

El Ático (Parte 3)


Jueves 6 de septiembre de 2012.

Vale. Tenía mucho tiempo para preparar el equipaje pero al final, como siempre, aquí estoy a última hora guardando las penúltimas cosas en una maleta que no cierra. ¿Por qué el último día antes de un viaje o una escapada se juntan en la agenda cien cosas importantes que sólo se pueden hacer en este día o que al final no has tenido tiempo para hacer antes? Y otra cosa. ¿De dónde salen tantos cargadores? Móvil, tablet, maquinilla de afeitar… Tengo un defecto importante y es que no sé simplificar.

sábado, 16 de marzo de 2013

El Ático (Parte 2)

Los fragmentos más interesantes de mi diario. 

Sábado 1 de septiembre de 2012.

Bieeeeen. Mi primer día de vacaciones. Siempre las suelo disfrutar en octubre y aprovecho para hacer algún viajecito tranquilo con los amigos fuera de la época punta de las vacaciones escolares (ver Noruega 2011) pero esta vez con el jaleo de la herencia he decidido aprovechar el mes de septiembre. ¡Lo tengo libre por completo! Si necesitara más días hay que tener en cuenta que aún me deben diez en el banco por acumular horas durante la semana y siempre podría después pedir un mes sin sueldo.

viernes, 8 de marzo de 2013

El Ático (Parte 1)

      Siempre quise cambiar mi vida. Llevaba quince años trabajando en el mismo banco, día tras día, frente al público tras un ventanuco de mala muerte. A esta sucursal de pequeña capital de provincia no habían llegado aún los avances técnicos de la central ni esos espacios amplios perfectamente climatizados donde además de trabajar se disfruta, tanto de la música de fondo como de la máquina del café. Sabía que de alguna manera, algún día, se iba a romper la monotonía de los días.